Cuando vi en el supermercado chino este producto, me llamó mucho la atención. De lejos parecen mini magdalenas cubiertas de coco, así que las compré. No había otro paquete igual en la tienda, motivo por el que pensé que quizá estaban buenas y que habían tenido éxito, y por ello no quedaban más. Desde luego es algo que nunca sabré (me refiero a su éxito, si están buenas o no hoy lo puedo decir).
Así que un día abrí el paquete y probé una. No se parecía en nada a una magdalena, por lo que llamarlo "pastel" (que es así como viene indicado en la etiqueta del anverso) me parece poco acertado. Cuando lo muerdes, ves que es una especie de gelatina espesa, transparente, como con algunas bolitas marrones que sospecho que son soja, pero que no afectan a la textura en absoluto (es decir, se ven pero no se notan como algo diferente). Lo que las espolvorea es coco, y le da un toque delicioso.
Son dulces, aunque la dulzura no se nota con el primer bocado, sino a medida que uno va comiendo, lo que es curioso. Me recuerdan mucho a unos dulces turcos, que son gominolas cuadradas de colores, y se llaman "Turkish delight".
Desde luego animo a probarlas, van bien con el té o en cualquier momento del día al que a uno le apetezca algo parecido a una golosina no muy empalagosa.
Muy ricos! el primer mordisco se hace un tanto extraño, pero después no puedes dejar de comerlo, a mi personalmente me gustó bastante, fue una nueva experiencia con la soja, y mira que me he hartado a comerla en mis años de vegetariano ;) increíble el juego que puede dar esta legumbre
ResponderEliminarNota importante: si se dejan en el frigorífico se ponen más duros, y se notan algo más las bolas de soja
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